dijous, 26 de novembre del 2015 (18:34)
Cinco rosas rojas y una blanca. Sonó el despertador, todas las mañanas, tras hacer mis ejercicios de estiramientos y respiración, con calma salía de mi cama. Pero esta mañana, me era imposible, no tenía energía ni para apagar la alarma, intenté no pensar, y con gran esfuerzo, conseguí salir de...